Se trata de una gigantografía de 3 por 6 metros. Colaboraron con dibujos un centenar de personas privadas de libertad de 18 cárceles o alcaidías bonaerenses. Lleva el título “Nada el pájaro y vuela el pez”. Los detalles.
En el marco de la conmemoración por el Día Mundial Contra el Trabajo Infantil se llevó a cabo este viernes una jornada en la Biblioteca Popular y Centro Cultural La Cárcova, en San Martín, en la que se presentó un mural confeccionado con el aporte de un centenar de personas privadas de libertad de 18 cárceles o alcaidías bonaerenses.
La producción artística formó parte del programa Efemérides en Contexto de Encierro que impulsa el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires.
La jornada en la Biblioteca Popular y Centro Cultural de calle Fray Beltrán al 2117 contó con la presencia del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof.
La obra artística contó con el aporte de personas privadas de libertad de las Unidades 3 San Nicolás, 8 Los Hornos, 9 La Plata, 10 y 34 Melchor Romero, 15 y 50 Batán, 19 Saavedra, 23 Florencio Varela, 27 Sierra Chica, 28 Magdalena, 30 General Alvear, 37 Barker y 41 y 57 Campana, además de las Alcaidías Departamentales de Avellaneda y Lomas de Zamora.
“Nada el pájaro y vuela el pez. Trabajo infantil: secuencias de una urgencia nacional”, así se llama la obra conjunta que fue sintetizada por las artistas Liley Amodeo y Gisela Ponce, funcionarias de la Dirección Provincial de Políticas de Inclusión y del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), en ese orden.
¿Cómo fue el proceso artístico?
La gigantografía o mural móvil elaborado en contexto de encierro es el resultado de la puesta en marcha del programa Efemérides en Contextos de Encierro cuyo objetivo apunta a abordar los hechos históricos argentinos que cobran relevancia en la construcción identitaria de la sociedad, con la particularidad de trabajarlos con perspectiva de género. En esta oportunidad, con la fecha: 12 de junio, “Día mundial contra el trabajo infantil”.
Desde la Dirección Provincial de Políticas de Inclusión explicaron que el trabajo se centró en el diseño de una propuesta pedagógica que fue enviada a todas las unidades penitenciarias de la provincia de Buenos Aires y conforme a la fecha límite acordada, se recepcionaron más de 100 dibujos, producidos por personas privadas de su libertad, de 18 Unidades Penitenciarias.
Posteriormente, con una parte de cada una de esas producciones, se compuso ésta gran obra colectiva que lleva el nombre de “Nada el pájaro y vuela el pez”, en homenaje a la artista argentina María Elena Walsh, ya que esa frase se utilizó como parte de la letra de la canción “El reino del revés”.
“En la obra se presentan diversas secuencias discursivas, cada una de ellas intenta relatar una representación de trabajo infantil. Podemos observar el trabajo doméstico intensivo, en el que se muestra una niña lavando y en paralelo sosteniendo sobre su espalda una bebé; también el trabajo infantil en ladrilleras en donde se puede observar un niño cuyo cuerpo es atravesado por una pared de ladrillos, cerca de una gran máquina mezcladora que se transforma en un reloj, elemento vinculado simbólicamente a la jornada laboral”, explicó Amodeo.
“La centralidad de la obra es protagonizada por una representación del trabajo infantil en talleres de confección de indumentaria, aquí quien desarrolla esta tarea, es un niño que aparece envuelto en una gran manta que está confeccionando, cuyos hilos lo sujetan del brazo con fuerte presión”, agregó la artista.
La explicación de la obra continúa: “También se puede observar el trabajo infantil callejero, en donde una niña realiza malabares con naranjas que se transforman en varios elementos, entre los que se destacan: cartones, baldes, secadores, cepillos, botellas y materiales de desecho; todos ellos conducen la mirada a una particular actividad dentro de este tipo de trabajo infantil, que se vincula a la recolección de basura. Ésta última, es representada por un niño que intenta con su cuerpo arrastrar un carro de grandes proporciones en el que también viaja otra pequeña niña”.
Finalmente, se presenta el trabajo infantil en la agricultura. En este caso también hay un niño que tracciona varias herramientas que se utilizan para realizar este tipo de trabajo, que por su ubicación apuntan sus filos al cuello/cabeza del infante. En éste inmenso canasto, también aparecen elementos que aluden a los agrotóxicos.
“Todas las secuencias se entrelazan, se conectan, dialogan, como microhistorias de las infancias más oscuras, más vulnerables, que sobreviven en el mismo escenario”, sintetizó Amodeo.
El mural, de tres metros de alto por seis de ancho, se terminó de realizar en la Unidad 10 Melchor Romero, y se descubrió en la jornada de este viernes en la que también se presentó una jugoteca, un espacio de lectura de cuentos con atriles para pintar y dibujar, y hubo muestras de talentos artísticos protagonizados por niños, niñas y adolescentes, de música y de circo.
Amodeo explicó que “se pasó el boceto con el método proyección, se manchó con aguadas ocres, luego se realizó el trabajo en línea y por último el detalle de cada una de las texturas visuales”.
La jornada fue organizada por la COPRETI junto a la Biblioteca La Cárcova, el Comedor El Progreso, el Comedor de Rafa, la Parroquia del Padre Pepe y el Municipio de San Martín.
Acompañaron la ministra de Trabajo, Mara Ruiz Malec; su par de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque; el intendente de San Martín, Fernando Moreira; el secretario ejecutivo de COPRETI, Juan Brasesco; el referente de los curas villeros José María “Pepe” Di Paola; y el presidente de la biblioteca, Waldemar Cubilla, además de Marcelo Iafolla, Director Provincial de Políticas de Inclusión del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y el Subdirector General de Educación del SPB, Marcos Blanes, entre otras autoridades.