El intendente Abella supervisó los nuevos trabajos que avanzaron por la calle Alferi, desde Córdoba hasta Gismundi. Previamente, se realizaron tareas hidráulicas para eliminar las zanjas.
El intendente Sebastián Abella supervisó la obra de asfalto que el Municipio realiza en el barrio Vitramu II y destacó su importancia para mejorar la calidad de vida de sus vecinos.
En tal sentido, ponderó los trabajos hidráulicos que se ejecutaron en la zona de manera previa para que los frentistas dejen de tener zanjas.
“Estamos llevando adelante un trabajo muy importante porque el asfalto se complementa con la construcción de cordón cuneta. Esto permite que muchos vecinos dejen de tener zanjas en la puerta de su casa lo que cambia significativamente su calidad de vida”, sostuvo el jefe comunal al recorrer la obra que avanza por la calle Alferi, desde Córdoba hasta Gismundi, junto a la directora General de Ingeniería Urbana, Luciana Lombradi.
También se asfaltaron Marchán, entre Modarelli y Alferi; y Carlos Fernández, entre Modarelli y Alferi, y esta semana se prevé continuar dos cuadras del contorno del Jardín de Infantes ubicado en Pedro Omar y San Luis.
“Tenemos un plan de asfalto previsto para el año 2022 para continuar con estas etapas que estamos haciendo con el propósito de dejar el barrio Lubo sin calles de tierra. Queremos poner en valor todas las calles”, dijo.
Abella también se refirió a la obra del nuevo colector cloacal del barrio Lubo detallando que se encuentra en el último tramo de construcción que comprende la unión de la etapa uno y dos.
“La obra está casi terminada lo que nos va a permitir, a partir de ahora, buscar los fondos necesarios para conectar los barrios La Argentina, Lubo y La Esperanza y así extender la red cloacal a esos vecinos. Una obra muy importante porque es la raíz de otra que los vecinos van a poder disfrutar una vez que podamos ejecutar la conexión domiciliaria a todos esos barrios”, concluyó.