El Presidente del Partido Justicialista de Campana, pidió al Intendente
Sebastián Abella “una explicación pública por la designación como funcionario de un ex espía de la Side, acusado de haber sido cómplice de delitos de lesa humanidad durante la Dictadura, a quien además se le pagaron más de dos millones de pesos como proveedor”. “Es un síntoma del blindaje absoluto que hay sobre la administración macrista de Campana” aseguró.
“No hay ningún tipo de respuestas por parte del Departamento Ejecutivo sobre la designación y posterior contratación de Carlos Alberto Lorenzati” dijo el Presidente del Partido Justicialista, Oscar Trujillo, en referencia a la polémica surgida en nuestra Ciudad tras conocerse que el ex integrante de la Side, y acusado por haber secuestrado a una mujer durante la Dictadura Militar, donde sirvió como servicio de inteligencia, había integrado el Ejecutivo Municipal, primero, y luego fue inscripto como proveedor Municipal.
“Además de todo lo siniestro que surge de esta situación, pensando en qué tarea estará realizando en Campana un ex espía, integrante del batallón 601 durante la Dictadura, y especialista en terrorismo islámico. Lo concreto es que el Intendente lleva una semana de silencio sobre la contratación de Lorenzati. Todo un síntoma del blindaje absoluto que hay sobre la administración macrista de Campana”.
Ante esta situación, Trujillo sembró dudas sobre la posibilidad de coexistir casos similares al del denunciado. “Todo esto nos lleva a preguntar cuántos Lorenzatis más hay en Campana. No se trata de una contratación cualquiera, primero por los montos que percibió, y segundo por lo dudoso de los servicios que dice haber prestado. Además, previamente había sido nombrado fue Sub Director Municipal. Deja en evidencia una clara maniobra de ocultamiento”.
Por último, el titular del Partido Justicialista lamentó que en la última sesión del Concejo deliberante, donde salió a la luz la situación de Lorenzati, “los Concejales del macrismo, muchos de ellos traicionando una historia de defensa de la democracia, levantaron la mano avalando la contratación de un personaje siniestro que ocupó un lugar de privilegio entre las filas del plantel político del Intendente Abella”, concluyó.