La crisis de nuestra organización municipal no es un tema que preocupe a muchos, sí a ciertos pensadores y académicos que vienen estudiando y exponiendo sobre el tema, como algunas organizaciones políticas que trabajan a nivel regional y mundial sobre la gobernanza en los gobiernos locales.
Las municipalidades, encargadas de administrar y brindar servicios públicos a nivel local, se encuentran sumergidas en una profunda crisis que afecta a la calidad de vida de sus vecinos. Y este no es un tema que esté en la agenda electoral en la actualidad.
Uno de los principales problemas es la centralización del poder político. En relación del gobierno de La Plata con sus Partidos-municipios y, de los intendentes que tienen un control casi absoluto sobre las decisiones del gobierno local, lo que genera un ambiente propicio para la corrupción, la ineficiencia y el abuso de poder.
La falta de transparencia es otro generador de esta crisis, que no es de sustitución de los Municipios, por el contrario, es de actualización bajo un sistema federal de gobierno. La opacidad en el manejo de los fondos públicos y la impunidad de los actos corruptos generan un clima de desconfianza en la comunidad. La malversación de fondos y la desvinculación entre los gobernantes y sus vecinos causa un desinterés por la actividad política, dejando a la dirigencia casi en soledad para el desarrollo de sus actividades lícitas como ilícitas.
La asfixia financiera es otro factor agravante. Muchos municipios se encuentran en una situación económica desequilibrada, lo que lleva a la falta de recursos para atender las necesidades básicas de la población. Es ahí donde se recurre, generalmente, al gobierno central que, aportando lo negociado, demandará cierta subordinación política.
La inacción de los gobiernos municipales frente a los problemas y la incompetencia en la gestión de los recursos son otras de las causas de la crisis. El aumento de tasas y contribuciones municipales como la acumulación de deuda pública son estrategias utilizadas para paliar la crisis económica, afectando directamente al municipio a mediano plazo, agravando así las problemáticas sociales de la comunidad, puesto que habrá área del organigrama municipal que no serán cubiertas adecuadamente, como, por ejemplo, la de Cultura o Deportes.
Ante este panorama, la comunidad expresa su hartazgo frente a la falta de respuestas por parte de las autoridades municipales. Sumado a que, el clientelismo político y la falta de atención a los reclamos de la población, profundizan el malestar general.
La crisis que afronta el actual régimen municipal necesita ser abordada de manera urgente. Es necesario implementar una reforma constitucional, como el Proyecto presentado por el Diputado Provincial de Saladillo, Walter Abarca, en marzo de este año por el cual se llama a una Convención Constituyente para otorgarle el derecho a los Municipios Bonaerenses a ser autónomos, como lo establece el art. 123 de la C.N. Promoviendo la transparencia política, la participación vecinal y la rendición de cuentas en la gestión de los recursos públicos, garantizando su correcta utilización y evitando la malversación de fondos.
La profesionalización de la gestión municipal, el fortalecimiento de los mecanismos de control y la promoción de la honestidad y la ética en el ejercicio del poder son aspectos fundamentales para superar esta crisis.
La revocación de mandato como herramienta de participación comunal puede ser una alternativa para garantizar una mayor rendición de cuentas y evitar la perpetuación de gobiernos corruptos e ineficientes.
La crisis de nuestro régimen municipal es una realidad que afecta directamente a los vecinos. La corrupción, la ineficiencia, el abuso de poder y la falta de transparencia son algunos de los problemas que aquejan a las municipalidades, retrasando el desarrollo y crecimiento de la Provincia de Buenos Ayres. Es fundamental implementar medidas que promuevan la participación del vecino, la transparencia en la gestión y, así, superar esta crisis mejorando la calidad de vida de todos nosotros. Para ello, el primer paso que debemos dar es reconocer la existencia de esta crisis y, así, poder constituir un sistema municipal bonaerense de respuestas rápidas y eficientes.
Luis Gotte
Mar del Plata
luisgotte@gmail.com