Un mensaje de esperanza y acompañamiento
Cada 10 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, una fecha impulsada por la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio y la Organización Mundial de la Salud. Su objetivo es visibilizar la importancia de hablar sobre este tema, derribar mitos y, sobre todo, ofrecer apoyo y contención a quienes atraviesan momentos de profundo dolor.
El lema que atraviesa esta jornada es claro: la vida siempre vale la pena ser vivida y nunca estamos solos. Hablar, escuchar y tender una mano puede marcar la diferencia.
La importancia de la prevención
El suicidio es una problemática compleja que afecta a millones de familias en el mundo. Sin embargo, es prevenible. La empatía, la escucha activa y el acompañamiento son herramientas fundamentales para brindar esperanza a quienes sienten que no encuentran salida.
Un mensaje de aliento
En este día especial, es importante recordar:
Siempre hay alguien dispuesto a escuchar. Una palabra de aliento puede abrir caminos de esperanza.
No estás solo/a. Familiares, amigos, profesionales y líneas de ayuda están disponibles.
Tu vida importa. Cada persona es única e irreemplazable, y el mundo es mejor con vos en él.
Buscar ayuda es un acto de valentía
Si estás pasando por un momento difícil, pedir ayuda no es señal de debilidad, sino de fortaleza. Hablar de lo que sentimos libera y abre la posibilidad de encontrar nuevas perspectivas.
En Argentina, el programa “Línea 135” brinda asistencia gratuita, anónima y disponible las 24 horas en la Ciudad de Buenos Aires y Gran Buenos Aires. Desde el resto del país se puede llamar al 011-5275-1135 o enviar un correo a ayuda@casbuenosaires.org.ar.
Un compromiso de todos
Prevenir el suicidio es una tarea colectiva. Este 10 de septiembre, el mensaje es claro: cuidémonos, escuchemos y acompañemos. Siempre hay una salida, siempre hay una razón para seguir adelante.