Hechos similares ocurren a diario en la ciudad, por ello, desde la Secretaría de Seguridad y Prevención Ciudadana del Municipio aconsejan a los vecinos a acatar las órdenes impartidas legítimamente por los inspectores al momento de constatar una infracción a la ley de tránsito.
Al momento de constatarse una infracción a la ley de tránsito, desde la Secretaría de Seguridad y Prevención Ciudadana del Municipio aconsejan a los vecinos acatar las órdenes impartidas legítimamente por los inspectores de la Dirección General de Tránsito y Transporte.
Principalmente en los casos que corresponde la incautación de un vehículo, se debe permitir que se realice la misma sin agravar la situación para evitar llegar a cometer un delito y/o poner en riesgo su vida o la de terceros.
Tal fue el caso, personal de tránsito en zona del Barrio Dálmine realizó días atrás un control de rutina, en base a sus facultades y pericia de alcoholemia, donde se constató que la graduación alcohólica que poseía un conductor ameritaba el secuestro del rodado.
Ante esto, inició una huida siendo perseguido por el móvil de los inspectores de tránsito, quienes solicitaron apoyo a las fuerzas de seguridad nacional y provincial, logrando así interceptarlo en Estrada y Dorrego. Participaron tanto personal de Prefectura Naval Argentina como área Prevención Ciudadana y Comando Patrulla.
El infractor, en lugar de acatar las órdenes intentó nuevamente fugarse poniendo en riesgo la vida de los agentes del orden amenazándolos de muerte.
Por ello, procedieron a reducirlo y aprehenderlo como así a secuestrar el rodado y labrar las correspondientes actuaciones por “Amenazas”, “Atentado y resistencia a la autoridad” con la intervención de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°2, y una infracción por conducir en estado de ebriedad con retención de la licencia dándole intervención la Juzgado de Faltas Municipal.